Setenta y cinco, ¿qué te dice este número?
Pueden ser tantas cosas… libros, viajes, asignaturas, likes, besos dados…
Pero no.
Setenta y cinco son los días que he estado contigo, en los que te he conocido. En los que hemos hecho mil cosas. Pero como dice la canción de Manuel Carrasco “Ya no”.
Ya no habrá más días juntos ni setenta y seis, ni cien. Ya no moriremos de amor y por más que quiera verte ya todo terminó. No tengo fuerzas para resistir ni debatir, no habrá canción ni baile de salón.
Leí que el amor podría tener fecha de caducidad, podrían decirnos cuando va a terminar la relación porque así lo daríamos todo desde el primer minuto. Pero yo de esto me río porque contigo lo di todo desde el principio, pero no te equivoques. Lo doy contigo y con todo. En lo que me implico y me responsabilizo doy mi 100 %. Y mil cicatrices tengo, pero me da igual. Prefiero los amores sin fecha de caducidad porque así puede que llegue uno y piense que es para siempre.
Setenta y cinco días dan para mucho, dan para hacer rutina y planes improvisados. Pero ya no. Fueron días preciosos de verano, días, tardes y noches juntos. Todo parecía tan real.
Y al final cada cual tiró por su camino, dos niveles distintos, uno como siempre se adelanta al otro y se produce el fracaso. Pero no le temo, he fracasado mil veces y una vez más… esto me va a hacer más fuerte. Setenta y cinco será un número triste y lo recordaré con melancolía. Ya no habrá más mensajes de madrugada ni tampoco estarás en mi timeline de Whatsapp…
Pero ten claro, pase lo que pase: siempre me voy a levantar, ¡¡¡siempre!!!